Andrea Fernández e Inés Muñoz |
Jugar pelotas al medio es vital en un partido de pádel. ¿Porqué? Porque es donde más hueco hay, y una de las máximas del pádel es jugar donde no está el jugador rival. Jugar al medio obliga al rival a desplazarse y genera dudas sobre quién tiene que ir a por esa bola.
Si repites varias bolas al medio, los rivales se juntarán más hacia el medio y dejarán espacios libres en las esquinas, por lo que puedo intentar una vez que los he desplazado enviar pelotas a esas zonas donde les resultará más complicado llegar y devolverme la pelota. Además, cuando juegas al medio, se disminuyen los ángulos desde los que me podrá atacar, no se abren tantos ángulos como cuando se juega en los laterales de fondo. Por todo esto, jugar al medio es imprescindible para obtener éxito en un partido de pádel.